El verano es el periodo de vacaciones para muchos, para mí el teletrgabajo durante el verano es parte esencial de mi negocio, ya que son meses en los que hay una gran demanda de profesionales de mi sector y, por supuesto, muchas posibilidades de conseguir nuevos proyectos.
Más allá del cambio en los horario de trabajo que realizo aprovechando los cambios en mis momentos de concentración, el teletrabajo durante el verano esignifica cambios debidos a que el volumen de trabajo aumenta a la misma velocidad que lo hacen las temperaturas y lo hace trayendo consigo modificaciones importantes en todo el proceso de trabajo.
¿Qué pasa con el teletrabajo durante el verano?
Las empresas están de vacaciones, yo no
Hay empresas que cierran en agosto y, directamente, me avisan para que tenga en cuenta que durante ese mes no enviarán pedidos, ya que no habrá nadie en oficina. Una situación perfecta, ya que se que es una empresa de la que no me tengo que preocupar y que no me enviará trabajo urgente durante ese tiempo.
Pero hay otras empresas que reparten las vacaciones de sus trabajadores a lo largo de dos o tres meses, que dividen las vacaciones por quincenas, y hay empresas que, aunque echen el cierre me dejan trabajo, para que no me aburra…
Y además, trabajo con autónomos, como yo, de esos que nunca desconectan, ni cuando están de vacaciones, y que pueden necesitar proyectos urgentes en cualquier momento.
O sea, que la mayoría de las empresas siguen en funcionamiento en verano, a otro ritmo, pero funcionando al fin y al cabo.
¿Por qué tengo trabajo en casa durante el verano?
Porque el 1 de septiembre es Año Nuevo
Que sí, que sí, que mucho celebrar Año Nuevo el 1 de enero, pero en el calendario empresarial, el ciclo se reinicia en 1 de septiembre, fecha que marca un nuevo comienzo: nuevos proyectos, nuevas colaboraciones, nuevos lanzamientos…
Así que en los meses anteriores hay muchas cosas que preparar para que con la vuelta de las vacaciones todo esté listo para salir al mercado o para hacer la presentación oficial.
Porque el personal interno está de vacaciones
Hay empresas que no son mis clientes habituales. A todos los autónomos nos encantaría que todas las empresas del mundo contaran con nosotros, pero entendemos que no es posible… Una de las razones puede ser que tengan a personal interno. Pero este personal interno también tiene derecho a vacaciones.
Así que, hay empresa que, en lugar de contratar a personal en prácticas cuando el volumen de trabajo es muy bajo, prefieren buscar a personal externo en el caso de que algún proyecto urgente se presentara.
Porque los freelance también tenemos vacaciones
Otro de los motivos por los que no todas las empresas cuentan con mis servicios es porque trabajan otros profesionales como yo… Pero todos tenemos derecho a vacaciones y algunos las disfrutan en verano; así que, en caso de necesidad, empresas nuevas o eventuales pueden recurrir a mí.
Esto no es algo que suponga tantos beneficios como podría pensarse, la mayoría de las empresas se acostumbran a una determinada forma de trabajar, así que recurrir a un freelance nuevo tiene por qué ser motivo de preocupación para el habitual, si la empresa está satisfecha con el trabajo.
Además, yo también me voy de vacaciones más adelante y lo hago sin miedo a perder clientes. En ¿Por qué las empresas dejan de trabajar con freelancers? indiqué las razones por las que se pueden perder clientes, e irse de vacaciones no es una de ellas.
Con un panorama así, y con la posibilidad de que un proyecto importante llegue a mi correo en cualquier momento: ¿Quién piensa ahora mismo en vacaciones? Desde luego, yo no.
¿Qué tal se lleva el teletrabajo durante el verano?
Que el teletrabajo durante el verano se lleve mejor o peor es una cuestión de actitud. Hay días en los que se me hace raro pensar en madrugar o en sentarme a trabajar mientras personas de mi entorno se levantan muy tarde, se pasan el día en la piscina o se van de viaje unos días… A pesar de que nos venden la idea de que todo el mundo está de vacaciones en verano, hay muchos que disfrutan del descanso en otro momento del año. Así que, ya llegará el mío.
Aunque la cuestión de las vacaciones, o no, del entorno. Hay otras cosas típicas del trabajo en verano en mi profesión que influyen mucho más en mi día a día y en los proyectos.
La primera de ellas son las fechas de entrega, que se reducen considerablemente y que ofrecen mucha menos flexibilidad. Con septiembre, y los nuevos proyectos a la vuelva de la esquina, los tiempos los marca el calendario. Hay mucho que hacer en poco tiempo.
Que la empresa cierre en agosto, que la persona encargada se marche de vacaciones y/o que otro profesional tenga que seguir con otra fase del proyecto cuando yo termine la mía significa que los tiempos son los que son. Así que hay poca libertad para negociar fechas de entrega: o se aceptan o se pierde el proyecto.
Además, en verano siempre hay personal en vacaciones. Cuando el proyecto se extiende más de quince días, uno de los problemas frecuentes es que la persona de contacto habitual se vaya de vacaciones en algún momento.
En este caso, es frecuente que:
- El habitual indique un contacto de otro departamento para llevar el seguimiento, y que este tenga información tipo: hay un freelance que lleva un proyecto para nuestra empresa.
- Haya alguien en prácticas al que han dado la formación mínima para “apañárselas” en el puesto de trabajo. Lo último de lo que se han preocupado es de decirle lo del freelance y el proyecto, no vaya a ser que robe secretos de empresa o algo…
En cualquiera de estos casos, cualquier consulta, duda o problema que tenga, va a suponer estrés, para mí, y para la persona con la responsabilidad de ayudarme. Esta posibilidad puede ser más estresante aun si la entrega también coincide con las vacaciones de la persona habitual de contacto o de quien gestiona el proyecto. Esta situación es muy rara y, aunque no sea el habitual, siempre hay alguien que tiene claro cómo debe desarrollarse el proyecto.
Lo mejor del teletrabajo durante el verano
Pero no todo es malo trabajando en verano. Lo mejor del verano es que si yo puede tener un horario intensivo es porque las empresas también lo tienen.
Además, se nota que trabajan a otro ritmo y las interrupciones son menos. Es decir, llegan menos correos electrónicos y, cuando llegan son proyectos grandes y para los que las negociaciones suelen ser ágiles y rápidas. Un ejemplo de comunicación en verano es:
Tenemos este proyecto para entregar en esta fecha. ¿Tienes disponibilidad? Si es así, dinos precio.
En el mismo día, o al día siguiente, el proyecto está confirmado o rechazado. Así que puedo trabajar de forma continuada durante periodos de tiempo más largos, y el tiempo me cunde más porque me concentro más en el proyecto que estoy realizando.
Estoy no ha hecho más que empezar porque las vacaciones son muy largas. Aunque hay muchas oportunidades de trabajo en casa durante el verano, las vacaciones hacen que estos meses sean un reto constante y eso que aun no he hablando sobre “el mes de vacaciones”, porque en agosto también hay trabajo, pero las condiciones cambian…
[…] luego, si el teletrabajo puede ser complicado, teletrabajar en verano debería considerarse una hazaña a la altura de las gestas de los antiguos héroes, pero no es […]
[…] Verano no es sinónimo de parón para freelancers, de hecho, el cambio de estación trae consigo nuevos proyectos en el horizonte, oportunidades que son interesantes porque son trabajo, pero sobre todo porque son grandes proyectos con plazos de entrega muy precisos. Pero del periodo estival en el universo freelancer ya hable en ¿Qué pasa con el trabajo en casa durante el verano? […]
Excelentemente explicado, como siempre. Mis intentos de compaginar vacaciones con trabajo siempre han sido un auténtico desastre así que ante la dificultad de establecer un “patrón de demanda” de las empresas, he optado por primar la cualidad sobre la cantidad: pocos días de vacaciones pero sin el más mínimo contacto con el mundo profesional. Un abrazo.
Coincido totalmente: pocos días de vacaciones bien invertidos al final cunden más para descansar, con eso y adaptando los horarios un poco, no es difícil disfrutar del verano 😉
¡Saludos!