Como profesional autónoma tengo claro que, si quiero trabajar, mi primer deber es hacer frente a las obligaciones legales y administrativas propias de mi profesión. En la mayoría de los casos, eso supone gastos.
Además, tengo que pagar un alquiler, los suministros, comer y esas cosas, y todo ello son gastos. Así que, cada mes tengo que asegurarme de ganar lo suficiente cómo para poder afrontar todos estos costes con cierta tranquilidad y, con un poco de suerte, un poco más para ahorrar.
Sin embargo, los periodos de baja demanda no son el único miedo al que me enfrento. Existe la posibilidad de que una enfermedad o un accidente me impidan trabajar. ¿Cuáles son las posibilidades de enfrentarse a una situación así al trabajar desde casa? Más de las que podría parecer.
Teletrabajo, baja laboral y seguros para autónomos

Las posibilidades de tener un accidente de tráfico in itinere son nulas, vale, y muchos de nuestros trabajos se desarrollan desde la tranquilidad de nuestros hogares, es cierto; pero eso no quiere decir que los freelances nos libremos de enfermar. Este es mi caso:
Durante mi último mes de embarazo sufrí una lumbalgia comprobé en primera persona que las prestaciones para autónomos son, en la práctica, inexistentes, y me explico:
- Los tres primeros días no percibí nada de nada
- A partir del cuarto día, el 60% de la base reguladora
- A partir del día veintiuno, el 75% de la base reguladora
Lo que se tradujo en unos 500€ de prestación antes de dar a luz.
Bueno, 500€ son mejor que nada, ¿no? Lo que pasa aunque se esté de baja por incapacidad temporal por enfermedad común hay que abonar la cuota de autónomos durante los dos primeros meses; o sea, que afronta un gasto de 300€ como mínimo. En mi caso, además, tengo que pagar gestoría y suscripciones a software esencial para mi trabajo.
O sea que: de los 500€ hay que descontar 300€ para cuota de la seguridad social. Los otros 200€ se fueron entre gestoría y software. Para mí quedaron unos 50€.
¿Qué hubiera ocurrido si no contara con un seguro baja laboral? Que la prestación la hubiera destinado integramente al pago de las obligaciones propias de mi trabajo y que, para vivir, hubiera tenido que tirar de ahorros, y todo en un momento tan delicado como la recta final de un embarazo.
¿Por qué contratar seguros para autónomos si teletrabajo?
Porque los autónomos no podemos permitirnos enfermar sin un seguro.
Literalmente. Las prestaciones son escasas y, en muchos casos, hay que seguir afrontando los gastos propios del autónomo y así es difícil vivir durante mucho tiempo-
Porque teletrabajo es sinónimo de conciliación.
Y muchos de los autónomos que trabajamos desde casa lo hacemos para cuidar de nuestra familia. Si una enfermedad o un accidente nos impiden trabajar, contar con un seguro para autónomos nos ayudará a poder seguir cuidando de nuestros hijos y cubrir sus necesidades.
Porque ofrece tranqulidad en momentos de incertidumbre laboral o económica.
Muchos autónomos somos quienes más ingresos aportamos en casa, así que la economía laboral se resiente cuando no podemos trabajar, pero es, sobre todo en periodos de incertidubre laboral o económica (como una crisis sanitaria) cuando es más importante tener la tranquilidad de que si nuestra pareja pierde el trabajo, que el autónomo enferme se convierta en una catástrofe para la economía familiar.
Porque la enfermedad no avisa.
Los autónomos no tenemos nómina ni salario fijo, tenemos periodos buenos, y otros no tan buenos, y un accidente o una enfermedad puede ocurrir en cualquier momento, y no solo podría suponer perder días, semanas o incluso meses de trabajo, sino que, de llegar en un periodo con alto volumen de trabajo, también podría afectar a periodos de menor demanda.
Los autónomos estamos acostumbrados a librar nuestras propias batallas solos y a pensar que podemos con todo, una enfermedad o un accidente no deberían ser razón para hacernos sentir inquietud o intranquilidad; sobre todo cuando existen seguros para autónomos que ofrecen tranquilidad cuando se necesita.