Cómo trabajar en casa dando clases de idiomas

Por Yentelman

Si esto fuera mi blog, empezaría, como siempre, diciendo eso de “bienvenidos a un nuevo post de Yentelman, el blog en el que aprenderéis inglés y, si os descuidáis, hasta español“. Pero no, hoy me toca hacer de guest blogger. Y, la verdad, ya iba siendo hora. Han pasado ya unos meses desde que María me comentara la posibilidad de escribir un post acerca de cómo trabajar en casa dando clases de idiomas y, aunque ahora mismo tengo un típico curro de oficina, se podría decir que conozco el mundillo lo suficiente como para poder comentar alguna cosa. Espero no haberme quedado demasiado obsoleto. En cualquier caso, ahí van my two cents.

Antes de empezar, decir que, si realmente os queréis plantear el reto de trabajar en casa dando clases de idiomas, debéis seguir el blog Un Idioma Cada Vez, de Óscar Ortega. Es una fuente de información muy útil a este respecto, y desarrolla mucho más a fondo la mayoría de aspectos que voy a comentar hoy aquí.

Y ya sin más preámbulos, vamos al grano. ¿Qué aspectos hay que tener en cuenta para poder convertirse en profesores de idiomas desde casa?

In the beginning…

Vamos a empezar dejando las cosas claras: No, para dar clases de idiomas no basta con ser hablante nativo de dicho idioma. Te diría que ni siquiera en el caso de que tan sólo busques clases de conversación. Siempre en mi opinión, para dar clases de idiomas hay que acompañar el conocimiento de dicho idioma con otros factores imprescindibles:

  • Formación, tanto en el idioma meta como, a ser posible, en aspectos docentes en general. ¿Te imaginas dando clases de español a un cani que diga “hayga” y no sepa distinguir entre “a ver” y “haber”? Pues errores similares los cometen nativos de todos los idiomas. Cuidadín.
Pic 1 - Cani en clase
ιғ тυ тea×eer тe vasιℓaн, тυ sнυт υp i ℓo asιмιℓaн ♦☆★!
  • Vocación por enseñar. Hay quien piensa que dar clases lo puede hacer cualquiera. Curiosamente, eso lo suelen decir los que no han pisado un aula en su vida (Hulio). Para poder enseñar y transmitir no basta con estar ahí y soltar tu rollo en plan “las rocas metamórficas denominadas genéricamente cornubianitas Gutiérrez que le veoooo…”. Te tiene que gustar lo que haces. Y de ese modo, transmitirás tu…
  • Pasión por la lengua que estás enseñando. Seamos sinceros, los idiomas se nos atragantan a la mayoría. Si quieres que un alumno se interese por un idioma, tienes que hacerle ver lo apasionante que es. Y para eso, tienes que transmitir esa pasión.
  • Actualización. He mencionado antes mi miedo a haberme quedado obsoleto. Y es que, trabajar en casa dando clases de idiomas hoy en día no tiene por qué implicar hacerlo de forma presencial. Las clases online están más de moda que nunca, y un profesor deberá estar convenientemente actualizado en cuanto al manejo de herramientas que faciliten el proceso de la docencia remota.

Hay muchos otros aspectos que habría que tener en cuenta a la hora de plantearse siquiera trabajar en casa dando clases de idiomas, pero de momento vamos a dejar ahí los preliminares y vamos a entrar más en harina.

Los alumnos

Bueno, pues ya has decidido que vas a trabajar en casa dando clases de idiomas. Tienes formación, vocación, pasión y estás actualizado. Eres el Terminator de los profesores domésticos. Ahora sólo te falta encontrar a tu Sarah Connor: tus alumnos.

pic 2 - Terminator teacher
“Necesito tu examen, tus apuntes, y tu boli bic”

En mi época, lo suyo era recorrer colegios, universidades y centros de estudios con un taco de fotocopias para pegar en tablones de anuncios y farolas varias. Dichas fotocopias, en las que uno se ofrecía para dar clases económicas, tenían la parte inferior recortada para que los alumnos potenciales pudieran llevarse a casa tu nombre y número de teléfono. Luego todo era cuestión de sentarse a esperar la llamada. Si esta llegaba, tocaba negociar: ¿Cuánto la hora? ¿En tu casa o en la mía? Etc.

Aunque, hoy en día, no es raro ver aún este tipo de ofertas (sobre todo por parte de universitarios en busca de algo de pasta para sus gastos), las nuevas tecnologías han hecho posible que tanto la búsqueda de alumnos como las clases sean procesos que pueden llevarse a cabo de forma remota. En este sentido, en internet existen plataformas específicas para que los profesores anuncien sus servicios. Soy sabedor de la opinión que mi anfitriona tiene de la mayoría de este tipo de plataformas, así que no ahondaré demasiado en ello.

Pic 3 - Se vende humo
Una imagen vale más que mil palabras

En lo que a mí respecta, mi forma favorita de captar alumnos es la página web personal. Aunque, como ya he dicho, ahora mismo trabajo por cuenta ajena, de vez en cuando redacto textos y hago traducciones para una empresa estadounidense. Mi blog Yentelman fue clave para conseguir ese trabajo y algún otro mini-proyecto puntual que me ha ido saliendo estos últimos años. Desde que se me ocurrió la idea para Yentelman, tuve clara la importancia de trabajar mi marca personal. Poco a poco he ido siendo incluso más consciente de ella. Y siempre he considerado la opción de utilizar el blog en un futuro como plataforma de lanzamiento para una “carrera en solitario” en caso de necesidad.

A día de hoy, mi blog me ha dado seguridad y confianza en mí mismo y mis habilidades docentes. La confianza de saber que, si en algún momento decido establecerme por mi cuenta, seré capaz de conseguir clientes y alumnos para trabajar en casa dando clases de idiomas, traduciendo, redactando textos o lo que surja.

Money, money, money

No os voy a mentir: trabajar en casa dando clases de idiomas conlleva estar en continua lucha contra el intrusismo profesional. Una gran cantidad de “profesores” son simples alumnos universitarios en busca de algo de dinero extra. Si hay suerte, algunos tendrán mimbres y conocimientos suficientes como para ayudar al estudiante de la ESO a aprobar inglés o francés. Estos docentes aficionados suelen ofrecer sus servicios a precios de risa en la mayoría de los casos. Luchar contra esto es lo difícil. Pero tampoco voy a ser yo quien tire la primera piedra, la verdad. Been there, done that, que se dice en inglés…

Pic 4 - life of Brian stoning
If you say “Jehovah” once more…

Para poder hacer frente al intrusismo, tienes que diferenciarte por calidad y valor, que no es lo mismo que precio. Si estás dispuesto a trabajar en casa dando clases de idiomas de forma profesional, tienes que tener siempre claro lo que vales. No tengas miedo a quedarte sin alumnos. A medio – largo plazo, no te conviene tirar precios en la errónea creencia de que así tendrás más trabajo.

Por lo demás, ser tu propio jefe implica tener ciertos conocimientos rudimentarios de gestión financiera. Si vas a establecerte como profesional, deberás hacerte autónomo. Eso, en un país como España, es un auténtico suplicio, pero oye… muchos otros lo han hecho antes que tú. Saber manejarte con impuestos, cuotas, etc… te permitirá ahorrarte el tener que contratar a un asesor fiscal para estos menesteres. Si, por el contrario, has hecho tus cálculos y descubierto que te sale más a cuenta pagar a alguien para que se ocupe de esos temas, pues adelante.

Otro aspecto monetario a tener en cuenta es el del pago por parte de los alumnos. Cuando yo daba clases particulares, antes de que existiera internet, me pagaban en mano y sin facturas. Pero si buscas hacer de las clases de idiomas tu modo de vida, tendrás que tomar una serie de medidas y decisiones. Por supuesto, cuánto cobrar por hora es la primera de ellas. Pero también cada cuánto cobrar (¿tras cada clase? ¿mensualmente?) y cómo hacerlo.

Gracias a los monederos electrónicos como PayPal, que un alumno online te pague desde otra ciudad o incluso otro país es más fácil que nunca. Sin embargo, también debes plantearte qué medidas tomar si un alumno no te paga a tiempo o deja de hacerlo sin más. Aquí ya entra la forma de actuar de cada uno. Yo no me he visto en esa tesitura, la verdad… pero si me ocurriera supongo que trataría de averiguar los motivos y actuaría en consecuencia.

Pic 5 - Vázquez 13 rue del percebe
Me conozco todos los trucos, que crecí con 13, Rue del Percebe

Otra cosilla que deberás tener en cuenta, y que está muy en boga sobre todo en el mundillo online, es la de ofrecer alguna clase de introducción gratuita. Aunque a nadie le agrada trabajar gratis, también es verdad que a todos nos gusta probar el producto antes de comprarlo. Un formato que he visto utilizar alguna vez en estos casos es el de efectuar una valoración de nivel en esta primera clase gratuita. Si lo piensas, tiene todo el sentido del mundo: vas a impartir una clase de idiomas, ergo te conviene saber qué nivel tiene tu alumno potencial de cara a preparar materiales adecuados.

Tecnología y organización

Para terminar este post sobre cómo trabajar en casa dando clases de idiomas, y a sabiendas de que me dejo muchos aspectos en el tintero, conviene enfatizar la importancia de organizarse bien y, al mismo tiempo, ser un poquito tech-savvy. Es decir, estar un poco al tanto de las últimas tecnologías e innovaciones en el mundo de la educación. Y es que ambos aspectos, en este caso, van necesariamente unidos. Una buena organización implica, entre otras cosas, gestionar bien el tiempo y contar con los materiales adecuados. Y la tecnología puede ayudarte, y mucho, en ambos casos.

Al enseñar idiomas desde tu hogar no cuentas con el respaldo de un centro que te proporcione el material. Por lo tanto, tienes dos opciones: o lo diseñas tú mismo, o lo adquieres por otras vías. En cualquier caso, debe ser adecuado para las necesidades de tu alumno. Aquí entra lo que hemos mencionado de la prueba de nivel. Y también la conexión con la tecnología: yo tengo mi blog de inglés que, modestia aparte, me parece que es un material cojonudo para impartir clases de este idioma. Pero, además, existen infinidad de recursos de todo tipo en la red, o en forma de app móvil, videojuegos, recursos audiovisuales, etc., que pueden ayudarte a construir una clase entretenida a la par que didáctica.

Pic 6 - You fight like a dairy farmer
Me llamo Guybrush Threepwood y quiero ser profesor de inglés

La gestión del tiempo te la pueden facilitar mucho todos estos elementos y alguno más. Desde software que te permite comprobar exactamente el tiempo efectivo durante el que impartes clase, hasta medios de comunicación como Skype, Adobe Connect o GoToMeeting para conectar con tus alumnos a distancia. Google supone también una excelente herramienta, al ofrecer un gran paquete de programas y utilidades que te pueden facilitar el control y gestión de muchos aspectos relacionados con trabajar en casa dando clases de idiomas. Puedes organizar tus clases con Google Calendar, o buscar una serie de vídeos didácticos en Youtube. Por no mencionar mi recurso favorito, el karaoke…

En fin, podría pegarme mucho más tiempo comentando la jugada, pero creo que, a grandes rasgos, os podéis hacer a la idea. Como ya he comentado al principio, si queréis profundizar en el tema, echad un ojo al blog de Óscar. Por lo demás, trabajar en casa dando clases de idiomas no es tan sencillo como pueda parecer. No si lo quieres hacer de forma profesional y ofreciendo un mínimo de calidad a tus alumnos. Como suelen bromear Faemino y Cansado al comienzo de sus espectáculos: “¡Y dicen que esto es fácil…!”.

Pic 7 - Faemino y Cansado
“dame veneno, me quiero morir, dame veneeenooo”

¿Algún profesor que trabaje desde casa y nos quiera contar su experiencia? ¿Anécdotas divertidas y/o curiosas? ¡Compartidlo con nosotros en los comentarios!

9 comentarios

  1. […] Cómo trabajar en casa dando clases de idiomas – Sobrevivir … Por lo demás, trabajar en casa dando clases de idiomas no es tan sencillo como pueda parecer. No si lo quieres hacer de forma profesional y ofreciendo un mínimo de calidad a tus alumnos. Como suelen bromear Faemino y Cansado al comienzo de sus espectáculos: “¡Y dicen que esto es fácil…!”. “dame veneno, me quiero morir, dame … […]

  2. Gracias por tu post!! Yo doy ahora clases de alemán gracias a la página de superprof.com haha Viva la vida freelancer!

    • Mi aventura freelance comenzó, precisamente, por un anuncio que puse en un portal de anuncios clasificados para impartir clases de español para extrranjeros. El resto es historia…. saludos

    • Gracias por la parte que me toca 🙂
      Yo estuve intentando aprender alemán dos años, y no hubo manera. Eso sí, en academia, e iba con un muy buen amigo mío… entre que nos distraíamos haciendo el chorras y que la profesora llevaba un ritmo distinto, no aprendí nada. Por eso siempre preferiré un profesor particular para empezar.

  3. Ha sido un placer poder colaborar escribiendo para tu blog, María.
    Que sepas que me lo pasé pipa escribiendo el post, y la verdad es que estoy muy contento con el resultado final. Espero que a tus lectores también les guste.

    ¡Abrazo!

Deja un comentario